Me despierto. Me despierto cada día y miro mis manos y mi intimidad, que salta de parte a parte de mi cuerpo y huye hacia otros. Que no me conocen, que no quieren conocerme. O quizá sí. pero me paran mis limitaciones. mi miedo al fracaso. Mi miedo a mí misma, a mi obsesión. Obsesión (calada). Obsesión (Uxue). Si tengo sexo con ella, con él, con ellos, con otros, ayer, hoy, mañana. Otra vez mañana. O puede que no lo tenga más y empiezo a sudar solo de pensarlo. Solo de creerme mi historía, mi sensación de no sentir nada. Y si lo pierdo? Ese momento tan efímero. ese instante que hay antes de la nada. Eses placer que se pierde al segundo y que queda sonlo en la idea y el recuerdo. Desaparece. Y solo intento recuperar algo que pasa a ser vacío cada vez. vivo enganchada a la mentira. Pero me encanta. lo disfruto. Déjame llorar. Deja que desborde todo mi nudo. Déjame a mi misma (yo), déjame llorar más (llora Carlos).
nota: la perspectiva de la obesión. Pensamiento de una persona que lo hace por necesidad, que vive el sexo cómo algo vital, sea placentero o no. Quizá el siguiente paso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario